Cuídate del engaño

Mateo 24:3-5

Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe.

Mateo 24:4

El engaño puede evitarse o Jesús no habría dicho: “Mirad que nadie os engañe”. Satanás solo puede engañar a aquellos que le permiten hacerlo. Efesios 6:11 nos dice: “Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo". Dios dijo toda la armadura. Muchos cristianos solo usan el casco de la salvación, y no saben que tienen más herramientas para vencer al diablo. Tenemos que entender nuestra posición de justicia en el Señor. También debemos poseer la fe, conocer la Palabra, y entender el evangelio de paz.

La vida cristiana es una lucha constante contra Satanás, quien procura corrompernos. La mayoría de nosotros estamos conscientes de la guerra espiritual pero no sabemos dónde está ocurriendo. La batalla está en nuestras mentes. Así como la serpiente no vino contra Eva con fuerza bruta, sino que usó palabras para engañarla; Satanás trata de corrompernos a través de pensamientos contrarios a la Palabra de Dios. Su táctica original era el engaño y ese sigue siendo su método de operación hoy en día.

Una de las características de los niños es que se dejan engañar fácilmente, son crédulos. Para que un creyente pase de ser ‘un niño’ a ser un Hijo o Hija de Dios, debe desarrollar discernimiento espiritual. Esto viene de estar fundamentado en la Palabra de Dios. La manera de reconocer el engaño no es analizar todas las afirmaciones falsas sino familiarizarse tanto con lo que es genuino que una falsificación será fácilmente reconocible.

Si permaneces en la Palabra de Dios y continúas caminando de acuerdo a la Palabra de Dios, no serás engañado. Podrás reconocer fácilmente cualquier pensamiento o idea que sea contraria a la verdad que ya conoces.

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