Los ojos espirituales de laesperanza
Romanos 8:20-25
Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?
Romanos 8:24
Por si no lo sabías, recibes más información a través de tus ojos que de cualquier otro sentido. Piensa en lo mucho que cambiaría tu vida si no pudieras ver. Por lo tanto, es fácil entender por qué dependes tanto de tu vista física. Sin embargo, hay cosas que no puedes ver.
En el reino de Dios, la esperanza cree en cosas que no tienen evidencia física. Es una confianza y dependencia en Dios para obtener resultados que no se pueden ver en lo natural. Aquellos que no pueden liberarse de sus sentidos, especialmente de su vista, nunca podrán operar en la clase de esperanza que proviene de Dios.
¿Cómo superamos lo que nos dicen nuestros ojos físicos? Si nuestras circunstancias son contrarias a lo que sabemos que Dios quiere que tengamos, ¿cómo conquistamos lo que vemos con la fe? La respuesta está en la Palabra de Dios. Por medio de meditar y actuar en la Palabra de Dios, obtendremos visión espiritual y podremos ver más claramente con nuestros ojos espirituales. Nosotros tenemos sentidos espirituales. A esto se refería Jesús cuando dijo: “El que tenga oídos para oír, que oiga” (Mt. 11:15). Contamos con oídos y ojos espirituales que nos permiten percibir cosas que están ‘ocultas’ para nuestros sentidos naturales.
Si no has comenzado a utilizar tus sentidos espirituales, empieza hoy mismo. Un consejo: no puedes ver con tus ojos físicos si están cerrados; del mismo modo, no puedes ver con tus ojos espirituales si no están abiertos al Espíritu y a la Palabra. Si no ves tu mundo a través de la Palabra de Dios impartida por el Espíritu Santo, estás espiritualmente ciego, ¡y no quieres estar ciego en tu espíritu! Abre tus ojos espirituales abriendo tu corazón a la Palabra de Dios, y entonces la esperanza se manifestará.
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