Sustituye los Malos Pensamientos
Hebreos 11:1-16
Pero anhelaban una mejor.
Hebreos 11:16
No puedes deshacerte de los pensamientos negativos reprendiéndolos. Hay que sustituir los pensamientos no deseados por otros nuevos. Piensa en una manzana. Ahora deja de pensar en una manzana. Reprende los pensamientos de una manzana. ¡No pienses en una manzana en el nombre de Jesús! Niégate a pensar en manzanas. ¿Sigues pensando en manzanas? ¡Por supuesto que sí! Intentar no pensar en algo sólo hace que pienses más en ello.
En lugar de pensar en manzanas, dirige tu atención a las fresas. Piensa en una hermosa y jugosa fresa roja. Piensa en lo dulce que sabe. Imagínate un campo entero de fresas con todas las frutas deliciosas pidiendo ser recogidas. O piensa en plátanos. Piensa un montón de ellos. Imagínate ir a alguna isla tropical y recogerlos tú mismo. ¿No sería genial?
Si sigues en esa línea de pensamiento, en poco tiempo te habrás olvidado por completo de las manzanas. Sólo puedes deshacerte de los pensamientos sustituyéndolos por otros. Cualquier esfuerzo por resistirse a los pensamientos negativos o pecaminosos en realidad fortalece su dominio sobre ti. La mejor manera es reemplazarlos con pensamientos de Dios de su Palabra. A medida que lees su Palabra, sus pensamientos comienzan a dominar tu pensamiento, y pronto los pensamientos negativos desaparecen.
Abraham encontró algo mejor en lo que pensar que lo que dejó atrás. Buscó un país mejor. Dios te ha dado una vida nueva en Cristo Jesús.
¡Seguro que hoy tienes algo maravilloso en lo que pensar!
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