¿Sabías que tú tienes la semilla incorruptible viviendo en ti? 🌱
1 Pedro 1:23 “siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre.”
Al igual que todos los nacimientos proceden de semillas, este nacimiento de lo alto procede de una semilla. Pero esta no es la semilla física de una planta o la semilla de un hombre. La semilla que produce la salvación es la Palabra de Dios.
Y así como sería insensato que una mujer esperara dar a luz a un niño cuando nunca ha tenido la semilla de un hombre plantada en su vientre, así también es insensato esperar que alguien sea salvo sin plantar la semilla de la Palabra de Dios en su corazón (Ro. 10:14-17).
Nota que la Palabra de Dios es una semilla incorruptible. Las semillas naturales a veces se pudren y no producen vida. Pero la Palabra de Dios es incorruptible. Siempre funciona. Sólo tenemos que plantarla.
Nota también que la semilla de la Palabra de Dios vive y permanece para siempre. No hay fecha de vencimiento en su potencia. Las palabras que el Señor habló a la gente hace miles de años TODAVÍA están vivas y activas y producirán milagros en nuestras vidas si mezclamos esas palabras con fe (He. 4:2). 📖